Los arquitectos portugueses Aires Mateus ganaron el premio Wienerberger Brick Award 2012, en la categoría de edificios residenciales, por su proyecto Residencia para ancianos en Alcácer do Sal, en Portugal. El proyecto se basa en una atenta lectura de la vida de una comunidad muy específica, una especie de micro-sociedad con sus propias reglas. Es un programa situado en algún punto entre un hotel y un hospital, que intenta comprender y reinterpretar la combinación entre social y privado, respondiendo a las necesidades de una vida social, y al mismo tiempo de solitud. 

El proyecto genera unas unidades independientes agregadas en un único volumen, cuyo diseño es expresivo y claro. La movilidad reducida de los que habitarán el edificio sugiere que cualquier desplazamiento debe ser una experiencia emotiva y variable.